La policía Nacional logro desarticular una red dedicada a estafar a inmigrantes; engañaban a los extranjeros con falsas promesas de ofertas laborales y la obtención del permiso de trabajo y residencia.
La operación delictiva se llevaba haciendo desde 2003 y estaba al frente de un abogado madrileño, estos contactaban con los inmigrantes de distintos países, los tentaban con falsas promesas de ofertas de trabajo en empresas ficticias o fantasmas (pues no existían) y cobraban entre 300 a 3000 euros comprometiéndose a obtener el permiso de residencia temporal y un trabajo por cuenta ajena.
Como es de suponer una vez que cobraban el dinero, los extranjeros no obtenían los trabajos y menos aun los permisos de residencia. La solicitud del permiso era presentada en la delegación de gobierno correspondiente, pero siempre era rechazada por no cumplir con los requisitos necesarios (cosa que el grupo estafador estaba al corriente de antemano); frente a esta circunstancia; ofrecía al extranjero gestionar una nueva oferta de empleo, cobrando nuevamente una nueva cantidad por los servicios de tramitación, que también sería rechazada.
Los estafados son en su mayoría residentes de la Ciudad de Madrid y la cantidad de damnificados suman alrededor de 500 extranjeros.
La sociedad creada con este fin se valía de la necesidad de los extranjeros por regularizar su situación, las numerosas denuncias de estafas presentadas en la Comisaría del distrito de Blas en Madrid, motivo la investigación policial que termino con la desarticulación del grupo delictivo.