La Policía Nacional descubre una organización formada por varias empresas dedicada a estafar a ciudadanos extranjeros, la mayoría latinoamericanos, con falsas ofertas de trabajo. Para comenzar el trámite de búsqueda de empleo en territorio español, los extranjeros debían hacer un depósito de 465 euros en una cuenta de la organización en su país de origen. Las autoridades creen que los damnificados ascienden a 3.500 en España y Latinoamérica y que han obtenido un beneficio de aproximadamente 2.000.000 de euros.

En Madrid y Murcia se han detenido cinco personas sospechosa, a las cuales se les imputa los delitos de estafa y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

El operativo se realizo con la colaboración de agentes de la Unidad Central contra las Redes de Inmigración y Falsedad Documentales junto con las Jefaturas Superiores de Policía de Madrid, Andalucía Oriental y Murcia.

A raíz de las denuncias presentadas por los damnificados en Perú, Ecuador y Colombia, la Brigada Central de Redes de Inmigración comienza una investigación en el año 2006, descubre una empresa con sede en España que captaba latinoamericanos en su país de origen por intermedio de sus filiales y hacían ofrecimientos de contratos de trabajo en España a cambio del pago de una cantidad de dinero. Realizado el ingreso de dinero por parte de los extranjeros interesados y posterior envió de un fax con el recibo correspondiente al pago; la empresa se contactaba con empresarios necesitados de mano de obra, solicitaban una oferta utilizando el nombre de la empresa, creyendo que también se ocuparían de los trámites legales.

Si se conseguí la oferta, el extranjero tenia que ingresar 800 euros para pagar el billete de avión y los importes por gestiones administrativas. Al llegar a España, el trabajador tenía que pagar otros 695 euros de honorarios por el trámite realizado, la oferta y el contrato de trabajo. En total el extranjero había abonado aproximadamente 2000 euros para lograr un empleo en España.

La realidad es que después de pagar los primeros 464 euros, los tiempos eran muy largos y las posibilidades de conseguir un empleo muy pocas. De todos los que se presentaban solo una treintena lograron un trabajo, de los cuales 25 ni siquiera han sido dados de alta o trabajan en empleos distintos a los autorizados en el permiso. También hay denuncias y reclamaciones por la devolución del dinero que se abono de forma anticipada, por que al llegar a España no lograron conseguir el permiso de trabajo.